l periodista mercantilista, Jaime de Althaus, acaba de escribir una loa al candidato lobbysta Pedro Pablo Kuczynski, tratando de convencer a los jóvenes que PPK no es un político tradicional, menos un tecnócrata tradicional, sino un Robin Hood moderno que tiene “vocación” de servicio por los pobres del Perú. Viniendo las alabanzas del periodista de CANAL N, publicista y colaborador del gobierno más corrupto de nuestra historia republicana, dice mucho de las simpatías por el candidato de la derecha.
Después del golpe de estado de la mafia FUJIMONTESINISTA, Jaime de Althaus participó como funcionario de la dictadura en varias CEPRIS, en algunos directorios y en el vocero fujimorista del Diario Expreso. Este señorón ilustrado nunca hizo distinción entre democracia y dictadura, sólo le importó servir a los grupos de poder económico sin hacer diferencias entre criminales (genocidas) y rateros de alto vuelo (lobbystas).
La corrupción es el mayor cáncer que empobrece al Perú, pero entre los niveles de soborno, el más execrable, que hipoteca los intereses del pueblo, son los lobbys; sin embargo este mal corroe las entrañas del país ocasionando pérdidas por 8000 mil millones de soles anuales, dinero que podría servir para atender a los más frágiles y desposeídos: los niños del Perú.
La exposición pública de los petroaudios, recientemente, ha puesto el tema de los lobbys en las primera planas de los diversos medios de comunicación. Se lo plantea como un tema de corrupción, negocios turbios de un grupo de políticos y empresarios tanto nacionales como extranjeros. Los lobistas no sólo son agentes intermediarios que realizan “faenones” entre las autoridades-funcionarios y empresarios corruptos, sino también a los accionistas y propietarios de empresas que ocupan puestos claves y que se sirven del Estado para beneficiar posiciones comerciales en detrimento del país.
El Lobbysta mayor, a leguas, es el candidato Pedro Pablo Kuczynski. Existe una amplia documentación, especialmente incluida en el libro “La República Lobbysta” de Julio del 2009, en la cual se explica la trama empresarial de PPK y sus actos como funcionario publico.
Su “Grupo empresarial” tiene dos niveles interdependientes. Un nivel son los Fondos LAEF y otro es su “Banca de Inversión”, First Capital, y West Field Capital. El eje de los Fondos es LAEF, que tiene versiones I, II y III. Gracias a ellos, recaba recursos de diversas entidades, para invertirlos. Con dinero de otros, activa en determinadas empresas, como plataforma para negocios entrelazados con favores del Estado y recursos de la nación.
Al mismo tiempo, con su “boutique financiera”, asesora a los mismos negocios en diversos servicios, desde bonos corporativos, recursos financieros, estrategias, etc. Este es el filón del negocio. Ambos niveles interdependientes de los Fondos y la boutique financiera, sólo son posibles porque dispone de un cargo político en el Estado y si es el de ministro, mejor, porque es la llave maestra patrimonial-mercantilista. Sea con los fondos públicos, los decretos supremos y de urgencia, las licitaciones y concursos, los avales de la banca multilateral, o la entrega de recursos naturales de la nación como el gas de Camisea. El dinero y recursos públicos son el objetivo primordial, el sustento final del negocio privado de intermediación.
Sus socios son los mismos, como se aprecia en la ficha de registro del Fondo LAEF en el 2010 en La Florida-USA. Estos 4 socios (PPK, Gerardo Sepúlveda, Fernando Montero, Eduardo Elejalde) tienen diversas vinculaciones empresariales (Grupo Romero, etc).
El Chileno Gerardo Sepúlveda es socio principal en todas sus empresas, y socio clave en el nivel “financiero” de Fisrt y West Field Capital. Lo sustituye temporalmente en directorios, como ocurrió en Ternium-Techint, mientras PPK, titular efectivo empresarial, era a la razón presidente del Consejo de Ministros, y cubría con impunidad las negligencias de la empresa Techint cuya construcción del gasoducto mostraba graves fallas.
La “boutique financiera” First Capital, es la que hace los negocios gruesos, generalmente en la sombra de sucesivas funciones publicas. Baste señalar que entre sus clientes están Kallpa, EgeCuzco, Corporacion Misti (Tramarsa-Claro), CONINSA IIRSAsur, Trasvase Olmos, Enersur, Calidda, TGP, Agunsa, etc. Propagandiza haber movido más de US$.2,500 millones de dólares entre 1992 y 2009, en esta trama superpuesta.
Lobby 1: Aeropuerto Jorge Chávez LAP:
Otorgando, como ministro de Economía y Finanzas, dinero publico a una empresa privada en la que participa.
El Aeropuerto Jorge Chávez había sido entregado en concesión al Consorcio LAP. (Lima Airport Partnes) en noviembre 2000. Uno de los socios era Cosapi con 14.6% de las acciones. PPK tenía en Cosapi 25% de acciones, con una inversión de US$ 10 millones de los fondos recabados por su empresa LAEF.
Como Director de Cosapi, PPK organizo el Consorcio LAP para ganar la Concesión del aeropuerto. El 2001 se le presento un problema a Cosapi, pues tras los atentados del 11 de setiembre los aeropuertos debían contratar Seguros adicionales. Estos Seguros eran responsabilidad del concesionario LAP.
PPK estaba en el Ministerio de Economía, entre el 28 de Julio 2001 y 11 Julio 2002. Dicta decretos de urgencia para que el Estado asuma la cobertura de riesgos para operaciones aeroportuarias. Son los DU 113 (28-09-2001), 121 (27-10-2001),131 (DU 14-12-2001) y 028 (11-06-2002). Tres de ellos firmados por PPK como titular del MEF. Con dinero publico, PPK como titular del MEF financiaba a su propia empresa privada, para un negocio diseñado por él mismo.
Lobby 2: Privatización de Puertos
Mientras era ministro diseñaba estrategia privada para empresa Chilena Agunsa en su expansión portuaria, y luego la continúa aplicando compartiendo sociedad empresarial con accionista y apoderado de empresas naviero portuarias Chilenas.
Siendo ministro de Economía y Finanzas del 28 Julio 2001 al 11 Julio 2002, director de la Copri y de Fonafe, PPK impulsó la política de privatización de los puertos públicos del Perú. Al mismo tiempo, de Junio a Diciembre 2001, pese a ser ministro, PPK fue asesor de estrategia financiera de Agunsa, empresa del grupo Chileno Urenda, para el proyecto de su expansión en el Pacífico Sur, es decir, al Perú.
Del 28 Febrero 2004 al 15 Agosto 2005, PPK retorna al MEF y en Agosto 2005 hasta Julio 2006 asume la Presidencia del Consejo de Ministros. Dicta la Resolución Suprema 098-2005-EF, por la cual Proinversion, asume las facultades para privatizar los puertos, en contra de lo que mandaba la ley.
Proinversion, con PPK, acuerda que se entregue la infraestructura existente y se convoque sin exigencias técnicas ni económicas, para favorecer al grupo proChileno Ransa-Dragados. El rechazo ciudadano derrota esta propuesta, y se cambia para convocar a construir un nuevo muelle, con requisitos definidos y que compita con Enapu, que gana DPW.
Al mismo tiempo que PPK actúa bajo su RS 098-2005-EF, tenía hasta el 2007 como socio empresarial en sus Fondos de Inversión privada, a Diego Aramburú, accionista y apoderado de empresas del grupo naviero portuario Chileno Urenda.
Después del 2006 PPK deja los cargos públicos pero no los puertos. Su boutique financiera, First Capital, en la que es propietario y principal accionista, participa en la venta del 100% de las acciones de la empresa Inversiones Misti del Perú (Grupo Claro, naviero portuario Chileno), y en una transacción de sus activos de más de US$ 22.5 millones.
Inversiones Misti tiene 49% de acciones de la empresa Chilena Tramarsa, buque insignia del grupo naviero portuario Chileno en el Perú. Esta transacción podría explicar el nuevo rol de Neptunia, subsidiaria del otro ramal naviero Chileno, el Grupo Von Appen, que ha pasado a controlar Paita, los aeropuertos del sur, el transporte de petróleo y de GLP; y pretende capturar el Puerto del Callo y liquidar Enapu, para remplazar a esta empresa en su rol nacional portuario.
Lobby 3: La ilegal entrega del Gas de Camisea para exportación, y el abierto conflicto de intereses de PPK
PPK tiene una larga vinculación con las empresas Techint, Hunt y Tractebel, en asuntos de asesoría financiera en proyectos de inversión. No es casual que con Pluspetrol formen el consorcio Camisea y obtengan a fin del 2000 el contrato sobre el gas del lote 88 de Camisea. Buscaba capturar el recurso para destinarlo a otras finalidades, básicamente a la exportación.
PPK entra al MEF el 28 de julio 2001 y permanece en el cargo hasta el 11 de julio de 2002. Cuando Shell desiste del lote 56 y lo revierte gratis al Estado, se convoca un concurso el que es rápidamente paralizado, pese a que las reservas probadas superaban el valor de US$ 20 mil millones de dólares.
El Consorcio Camisea inicia tratativas para adjudicarse el lote 56. Con PPK se transforma en una ilegal adjudicación directa, a dedo. En los registros se altera ilegalmente la calificación de “probadas” de las reservas devueltas por Shell, para señalarlas como “probables”. De este modo fraudulento se buscaba anular la propiedad del Estado y alistar su posterior adjudicación a dedo.
PPK adopta decisiones claves desde su cargo estatal. Promueve el DS 046-2002-EM que adelanta en dos años el subsidio al Consorcio Camisea de US$ 200 millones, recolectado por el pago de todos los peruanos como aporte al gasoducto. Otorga a Calidda (entonces Tractebel) un subsidio estatal de Ingreso Garantizado, asegurando su rentabilidad. Prepublica y concluye acuerdo sobre norma para anular el horizonte obligatorio de 20 años para permitir que se exporte el gas, dejando todo listo para la promulgación del DS 031-2003-EM, cuando ya no estaba en el cargo.
Complementa esta estrategia que en el ámbito privado, TGP (del consorcio Camisea) encarga a Techint, otro de los socios en que participa PPK, las obras de construcción por US$ 571.6 millones.
Allanado el camino, PPK deja los cargos públicos para alistar capturar el gas de Camisea y su infraestructura para desviarlo a la exportación. Aparece como Director de Tenaris (matriz de Techint), y participa en la ejecución en Perú. Subcontratan a Skanska para la construcción. Skanska tiene en Argentina una acusación judicial por sobornos en la construcción de ductos, existiendo pruebas judiciales de sobornos en el Perú en ese periodo por US$ 1,2 millones de dólares, lo que, por supuesto, nadie ha investigado.
Entre 2002 y 2004, PPK asesora a Hunt en el diseño de la exportación del gas de Camisea. Con su boutique financiera First Capital, en ese periodo, realiza asesoría financiera a TGP (bonos por US$ 360 millones), a Calidda-tractebel (financiamiento por US$ 35 millones) y Enersur Tractebel ( por US$ 148 millones).
Ya en camino la construcción del ducto y los arreglos financieros, PPK retorna a la gestión pública para conseguir se exporte el gas. Vuelve al MEF de 28 Febrero 2004 a 15 Agosto 2005, continuando en la PCM de 16 Agosto 2005 al 28 Julio 2006. Estaba todo listo para expropiarle al Perú el destino del gas, y utilizar la infraestructura para propósitos distintos a los que había sido construida.
En Agosto del 2004 el gas llega a Lima. Se promulga la Ley 28552, para tratar de anular la prioridad de abastecimiento del gas al mercado nacional. Con PPK en el Gabinete, se reactiva la adjudicación a dedo del lote 56, y se regala el gas valorizado en US$ 20 mil millones a Hunt, su asesorado, para la exportación.
La primera opción de exportación que promueve PPK era llevar el gas por un ducto desde Pisco a Tocopilla, para lo cual casi compromete al Perú en el llamado “Anillo energético”. Las denuncias hizo que el país lo rechace. Cuando estaba en el MEF el 26 de Abril del 2005, PPK anuncia en Chile el anillo energético, mientras Tractebel-Enap hacían el estudio de factibilidad, y la empresa privada de PPK, su boutique financiera, First Capital, hacia una asesoría a Enersur-Tractebel por US$ 58 millones.
Al pasar a la Presidencia del Consejo de Ministros, termina de armar el fraude al Perú. Ahora cambia para utilizar la opción de transformarlo en líquidos para exportarlo en buques metaneros. Con los DS 050-2005-EM y 006-2006-EM se da ilegal pase a la exportación del gas del lote 88.
La Ley 2863 da beneficios tributarios a la exportación del gas. El DS 060-2005 modifica el contrato del lote 56 para incluir a Repsol, que asume el 100 % del comercio de vender el gas de exportación. En Febrero 2006 Perú LNG suscribe contratos de exportación. Queda sellado el negocio ilegal.
Existen denuncias de desabastecimiento regional y nacional, varias investigaciones del Congreso, una denuncia penal actual en tramite en el Poder Ejecutivo contra Toledo y otros que incluye a PPK (Ver “La Nación peruana Bicentenaria”, 2010), una comisión de “renegociación” en marcha, la denuncia del descuento sobrevaluado del costo de barril de líquidos de gas, defraudando al Estado US$ 381 millones entre 2004-2010, y que continúa con US$ 3 millones mensuales por 24 años más.
Por supuesto PPK no es un lobbysta tradicional que sólo es un intermediario, como Rómulo León, sino que lo hizo directamente como ministro de economía o Premier; cobrando el 10% por sus “honorarios de éxito”, además de recibir su “Coimisión” como funcionario de gobierno y obtener su “rentabilidad” por ser accionista de la empresa “favorecida”. Claro, estamos de acuerdo con Jaime de Althaus, pues PPK no es un tecnócrata tradicional que se deja “aceitar” para cobrar su “Coimisión”, sino que el mismo gestiona toda la corrupción.
El libre mercado en el país es una falacia, como la meritocracia de Chang. Los lobbystas se encargan de que no lo sea, el mercantilismo se impone sobre la libre competencia y permite el saqueo de nuestros recursos naturales.
Fuente: Herald/La República lobbysta.